Satoshi en Venezuela

¿Cuántos BTC se enviaron en la primera transacción de Bitcoin?

El 12 de enero de 2009 se realizó la primera transacción entre dos personas en la red de Bitcoin, cuando Satoshi Nakamoto, creador (o grupo de creadores) de la criptomoneda, envió un total de 10 bitcoins a Hal Finney, un criptógrafo estadounidense muy activo en el desarrollo y puesta en marcha de este proyecto.

Varios meses antes que esta transacción tuviera lugar, había iniciado una importante crisis financiera relacionada con el mercado inmobiliario de Estados Unidos; el cual, apalancado por esquemas de deuda irreales, terminó colapsando y afectando a toda la economía. Ahorristas, pequeñas y medianas industrias sufrieron el descalabro. Bancos y países a nivel global también se vieron afectados, dejando las peores consecuencias para los ciudadanos comunes.

No obstante, a la par de este suceso, se desarrolla Bitcoin, cuyo diseño es la amalgama de otras ideas y propósitos técnicos ya existentes. Su objetivo primordial era, y sigue siendo, el de ofrecer una herramienta de intercambio de valor, de potencial alcance global y de naturaleza descentralizada.

Hal Finney y los primeros 10 BTC

El de Finney es un caso paradigmático para Bitcoin. Según los correos y la información conocida hasta ahora, el criptógrafo fue uno de los primeros en interesarse de manera significativa en la tecnología de esta, la primera criptomoneda.

Finney añadió su propio esfuerzo para el crecimiento de Bitcoin por medio de su trabajo previo, su labor en el desarrollo del sistema de encriptación PGP, la utilización de pruebas de trabajo (Proof of Work) reutilizables, sus revisiones y comentarios sobre el diseño de la red.

El estadounidense se convirtió en un asiduo revisor de los avances de Nakamoto, e incluso fue uno de los primeros en descargar el «cliente de Satoshi«, la versión original de la implementación de Bitcoin.

Mientras otros dudaron, Finney se mantuvo apoyando a Nakamoto y el advenimiento de Bitcoin. Quizá por eso haya sido él quien recibiera los primeros 10 bitcoins enviados a través de esta poderosa red, que apenas daba sus primeros pasos.

Así lo resumía en 2013, a través de Bitcointalk:

Cuando Satoshi anunció el primer lanzamiento del software, lo tomé de inmediato. Creo que fui la primera persona además de Satoshi en ejecutar Bitcoin. Miné el bloque 70 y algo, y recibí la primera transacción de bitcoin, cuando Satoshi me envió diez monedas como prueba. Mantuve una conversación por correo electrónico con Satoshi durante los próximos días, en su mayoría yo informando de errores y él solucionándolos.

Hal Finney

Finney confesó haber quedado fascinado por lo que proponía Bitcoin. De hecho, la experiencia previa de Finney con sistemas encriptados para preservar la privacidad de sus usuarios tenía un correlato pleno en el objetivo de Nakamoto. Aunque, Bitcoin lleva las implicaciones más allá, ya que busca incluir el intercambio global y descentralizado de valor, y no solo información.

La transacción se realizó directamente entre el monedero de Nakamoto y el de Finney. Dado que la recompensa por bloque minado en ese entonces era de 50 BTC, la otra transacción visible de este bloque corresponde a los 40 BTC restantes que vuelven a una dirección asociada al emisor.

Se dice que Finney consideraba devolverle los 10 bitcoins a Nakamoto, aunque no logró hacerlo antes de que el creador de Bitcoin desapareciera misteriosamente. A pesar de ello, estos 10 bitcoins que recibió Finney de parte de Nakamoto no eran sus primeros bitcoins (BTC). Puesto que, al haberse relacionado tan pronto con Bitcoin y la primera versión del cliente, Finney recibió 50 BTC de recompensa por el minado del bloque 78 de la red. Finney dejó de operar su nodo, pero continuó informándose sobre el desarrollo de esta tecnología.

En 2010, cuando Bitcoin adquiere valor monetario, Finney recupera los bitcoins que había acumulado. «Saqué el polvo de mi vieja billetera y me sentí aliviado al descubrir que mis bitcoins todavía estaban allí. A medida que el precio subía en dinero real, transferí las monedas a una billetera fuera de línea, donde espero que valgan algo para mis herederos», añadió el criptógrafo sobre sus primeras experiencias con bitcoins.

A Finney se le diagnosticó una enfermedad degenerativa conocida como ALS. Falleció en 2014 y fue criogenizado. Sin embargo, cada año que Bitcoin continúe dejando huella en la historia de la humanidad, a Finney se le recordará por haber recibido la primera transacción de la red, y de la mano del propio Nakamoto.

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